El club brasileño Gremio anunció que apelará por la sanción de seis partidos impuesta por la Conmebol al técnico, Vanderlei Luxemburgo, por la riña tras el partido de Copa Libertadores ante Huachipato, por considerarla "absolutamente desproporcionada".

El afectado negó haber provocado al cuerpo técnico "acerero", asegurando que lo único que hizo fue salir corriendo para evitar la pelea.

"Si alguien debería ser suspendido sería el entrenador de ellos -Jorge Pellicer-. Los jugadores intentaron agredirme y ¿el castigado fui yo? Fue un juicio injusto. Las imágenes mostraron eso", dijo el DT.

El ex adiestrador de la selección brasileña, que deberá pagar una multa de 25.000 dólares, negó haberse rebelado contra la Conmebol al negarse a dar la rueda de prensa tras el partido en la sala de prensa, a lo que adujo motivos de seguridad.

"Quien estaba allí vio que la única cosa que hice fue salir de la gresca e intentar llegar al vestuario. Después del partido concedí la rueda de prensa al lado del vestuario porque si hubiera pasado por el pasillo que había, la gresca habría sido aún peor, pues tenía que pasar por los jugadores de Huachipato. Quise evitar lo que pudiera pasar", agregó.

El técnico también se quejó del funcionamiento del Tribunal de Disciplina de la Conmebol, del que dijo que desconoce su funcionamiento.

Además de Luxemburgo también fueron sancionados su ayudante, Emerson Ferreira, con ocho partidos de suspensión, y el defensa brasileño Douglas Grolli, con cuatro encuentros.