El mejor gimnasta chileno de todos los tiempos, Tomás González, afrontará un gran reto de cara a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.

Tanto así, que decidió abandonar por ahora la búsqueda del salto que llevará su nombre, por un desafío que explicó al diario El Mercurio.

"No, ya no lo haré. Estoy preparando un salto de mayor complejidad. No es nuevo, pero sí tiene más alto puntaje. Llega a 6,2 de dificultad, que será el segundo más alto del mundo, después del que hace el coreano (Yang Hak-Seon), debido al cambio de puntaje", explicó.

"Es un Yurckenko con medio giro de entrada, que sale hacia adelante con mortal", agregó.

Adelantó que no lo utilizará en los Juegos Sudamericanos Santiago 2014.

"No, no quiero arriesgarme ahí. Además, con los saltos que hice en Londres me debiera alcanzar para una medalla. Prefiero empezar a trabajarlo durante el año, para afinarlo y llegar bien a los Juegos Olímpicos de Río 2016", comentó.