La ATP rechazó reconocer al argentino Guillermo Vilas como número uno del mundo en la década de los '70, tras una solicitud del periodista trasandino Eduardo Puppo de revisar los puntos ganados por el mejor tenista de todos los tiempos del vecino país.

De esta forma, el chileno Marcelo Ríos continúa como el primer latinoamericano en liderar la clasificación mundial, logo conseguido en 1998.

El argumento de Puppo era que Vilas llegó a ser número uno del mundo en algunas semanas de 1975 y 1976, fechas en que el ránking ATP no fue publicado oficialmente.

El trasandino, ganador de 62 torneos, entre ellos cuatro Grand Slams, solo fue situado como dos del orbe detrás de estadounidense Jimmy Connors.

Después de Ríos, el brasileño Gustavo Kuerten alcanzó la cima del tenis en 2000, siendo el otro sudamericano en conseguirlo.