El escolta de Los Angeles Lakers Kentavious Caldwell-Pope cumple una pena de cárcel de 25 días que le fue impuesta luego de faltar a los controles de alcohol y drogas durante el periodo de su libertad condicional, la cual le impide jugar los duelos de visita del equipo, que se disputen fuera de California.

De acuerdo a lo que informó el medio Los Angeles Times, el tercer máximo anotador del equipo tiene autorización para dejar el recinto en que está detenido, con el fin de entrenar y jugar los partidos de local, mas está impedido de abandonar el estado.

El jugador de 24 años fue detenido manejando bajo la influencia de sustancias ilícitas en marzo, cuando militaba en Detroit Pistons. Su sentencia dictaminó el cumplimiento de la pena en libertad condicional por un año, durante el cual debía pasar por pruebas para demostrar si ingería alcohol o drogas.

Caldwell-Pope faltó a varios de estos exámenes, por lo cual le fue impuesta la pena de 25 días, pese a la cual puede asistir a las prácticas y los partidos en California, siempre y cuando su ubicación sea monitoreada a través de un GPS.