Por José Antonio Prieto, @TPrietoRadio

Cuando Héctor Tapia dice que fue "una apuesta" la no convocatoria de Esteban Paredes, Jorge Valdivia y Carlos Carmona para el partido con Iquique, es un mensaje desafortunado.

Y lo es, no porque Colo Colo perdió el partido. Incluso ganándolo, también es una mirada que genera confusión.

No hay dudas que la decisión estuvo relacionada con el clásico frente a Universidad de Chile.

El DT no pudo abstraerse de tomar una decisión sin la influencia que hoy tienen las redes sociales, las estadísticas, los reportajes, y que remarcan los muchos años sin perder con los azules en el Monumental.

Para los hinchas una victoria ante la U será para mofarse del rival y refregar su victoria.

Pero Colo Colo se privó de al menos haber sostenido la diferencia con la UC. Ahora están a 10 puntos de diferencia casi sin opción al título.

¿Se puede exigir a futbolistas de larga trayectoria cuidarse para no tener una tarjeta amarilla?

¿Pueden jugar 3 partidos en 10 días?

¿El equipo se debilita sin Valdivia. Paredes y Carmona?

Un SI GRANDE para todas.

La apuesta de Tapia conlleva muchos riesgos. La primera apuesta la perdió y ahora queda muy expuesto a no fallar ni con la U y en la Copa Libertadores. El ciclo se cierra el miércoles 29 de agosto en la revancha ante Corinthians.

Es mejor tomar decisiones que apostar en el fútbol. No es jugar en la ruleta de un casino.