Reinaldo Rueda, técnico de la selección chilena, realizó un balance de su primer año en la banca de la Roja y aseguró que esperaba un mejor rendimiento.

"Uno siempre sueña con más. Lo de Perú y Costa Rica no lo esperábamos, porque conocemos la calidad y jerarquía de nuestros jugadores. Eso mermó el rendimiento de la evaluación final del año. Esperábamos más, no tenemos que autoengañarnos. Pero es un trabajo aceptable, por todo lo que significa por el irregular momento que están pasando los referentes", declaró Rueda al CDF.

Pese a tener esa sensación, resaltó que 2018 "se cierra con un balance importante, quizás no el ideal. Estamos en ese proceso de transición, buscando el camino para el próximo año".

Respecto a esa transición, el colombiano indicó que "es difícil" si los jugadores llegan sin tener continuidad en sus equipos.

"Los jóvenes de gran talento, como Paulo Díaz, Guilermo Maripán, Bryan Cortés... Erick Pulgar, Diego Valdés, Lorenzo Reyes hay que respaldarlos con los grandes. Ojalá todos puedan llegar en mayo jugando 20 juegos, como mínimo. Seríamos ese Chile que alguna vez fue grande", concluyó.

Por último, Rueda reveló que el plan es que Chile juegue amistosos en marzo, abril e incluso uno en junio, poco antes de que arranque la Copa América en Brasil. "Estamos tratando de cuadrar el calendario. No es un proceso fácil", sentenció.