Este lunes, el futbolista bahreiní Hakeem Al Araibi, quien se encontraba en prisión en Tailandia y con su país tratando de extraditarlo, fue dejado en libertad, situación que fue celebrada por la FIFA, quien hizo fuerza durante los últimos meses para que el jugador fuera liberado, apoyando la campaña #SaveHakeem.

La situación de Al Araibi era increíble, ya que tras ser detenido en Bahrein en 2012 por suspuestos actos vandálicos, logró escaparse a Australia como refugiado, donde volvió a jugar al fútbol, país en el que se encontraba hasta hace unos meses, cuando tras casarse con su novia decidió ir de luna de miel a tierras tailandesas, lugar en el que fue recluído nuevamente.

Tras la liberación, la FIFA emitió un comunicado en el que declaró que "está extremadamente complacida de ver a Hakeem Al-Araibi liberado de prisión en Tailandia y permitido viajar de regreso a su casa en Australia".

"Este es el resultado por el que hemos trabajado junto con una amplia coalición de organizaciones de Derechos Humanos, gobiernos y la comunidad futbolística en general durante los últimos dos meses", añadió.

"Nos gustaría agradecer sinceramente a todos los que han contribuido a este resultado y, en particular, a las autoridades públicas pertinentes por hacer lo correcto y poner fin a la prueba de Hakeem. Le deseamos a Hakeem un regreso seguro a su familia y esperamos que pueda reanudar su carrera futbolística pronto", cerró.