Manchester City derrumbó los fuertes argumentos de Napoli en el Estadio San Paolo con un inapelable 4-2, resultado que aseguró el avance a octavos de final para el equipo inglés, quien cuenta una campaña perfecta con cuatro victorias en el Grupo F.

A lo largo del encuentro, las destacadas intervenciones del portero brasileño Ederson mantuvieron en la banca "citizen" al chileno Claudio Bravo.

La iniciativa fue tomada por los italianos. Hasta los 20' el principal agente en ataque fue Dries Mertens, quien finalmente dio clases con una asistencia a Lorenzo Insigne, para que este desatara el festejo con una diagonal al segundo palo.

La igualdad llegó con firma de Nicolás Otamendi. El argentino tomó ventaja de un centro de Ilkay Gündogan y ejecutó con un fuerte cabezazo (34').

La ida y vuelta del primer tiempo se retomó de forma inmediata en el complemento, con un gol por altura de John Stones (48').

Sané, quien se había anotado con la asistencia del segundo tanto, volvió a captar miradas a los 61', aunque por cometer una falta penal que cobró de forma impecalbe Jorginho.

Sergio Agüero, sin embargo tenía una cita con la historia que acabaría por definir el encuentro.

Un contundente contragolpe liderado por Sané y culminado por el "Kun" dejó al ariete trasandino como el máximo artillero en la historia de los "Citizens", al superar por una diana la marca que el inglés Eric Brook mantuvo por 79 años.

Ese gol acabó con un Nápoles que terminó concediendo también el 4-2, firmado por Sterling a pase del belga Kevin De Bruyne en el minuto 92.

Noche dulce para el City, que ya está en octavos con dos jornadas de antelación al contar 12 puntos en la tabla y sacar una ventaja de nueve al tercer ubicado en la tabla.

Los napolitanos, en tanto, quedaron contra las cuerdas y están a un paso de caer eliminados en la fase de grupos de la Liga de Campeones al acumula apenas tres unidades.