Por Rodrigo Retamal

Cerca del ciento por ciento de su capacidad y sin ninguna molestia, aunque debe reforzar el trabajo de bicicleta, confiesa estar Cristián Bustos a poco más de una semana de su última competencia como profesional, el Half Ironman de Pucón 2006, luego de una trayectoria de más de 20 años que lo hizo pasar a la historia como uno de los mejores triatletas chilenos.

"Ahora quiero disfrutar del deporte y no depender de la presión de los resultados. Llegó la hora de descansar", afirmó respecto de su retiro.

Aunque reconoce que año tras año aumenta el nivel competitivo del tradicional evento que se desarrolla en el balneario de la Novena Región, Bustos confía en despedirse a lo grande el 22 de enero.

"Siempre entregué todas las energías en todos los eventos. Y de todas maneras en Pucón lo voy a hacer y espero tener un buen lugar", sostuvo.

"Esta vez es la segunda y definitiva", aclara el destacado deoportista nacional, quien en 2001 abandonó las competencias, aunque después regresó "porque quedé con el bichito pues sabía del nivel que tenía y me propuse entregarlo hasta los 40 años".

Pero de cara a Pucón 2006 llegaron las cuatro décadas para el deportista, edad suficiente para que Bustos se decidiera a dejar el triatlón antes de que la actividad lo dejara a él. "Tuve un tercer lugar en Brasil que no muchas personas pueden contar con eso", es su argumento.

Una vez fuera del deporte competitivo, Cristián Bustos pretende que sus planes sigan ligados a Universidad Católica, el club de toda su vida deportiva. Aunque no quiso entrar en detalles, el deportista afirmó que "uno de los proyectos es trabajar en el club, estamos en conversaciones para que me quede acá. Soy una de las imágenes más claras y sería bueno que me quedara en Católica"

Balances de una carrera deportiva

Para Cristián Bustos, lo más importante de su carrera fue su segundo lugar en el Ironman de Hawai en 1992, la victoria en el Triatlón de Alemania en 1993, "donde logré el segundo mejor marca de toda la historia de la competencia", y el primer lugar en Canadá en 1998.

Otro gran momento fue cuando en Pucón logró vencer a Mark Allen, uno de los grandes del triatlón mundial y ganador de seis versiones en Hawai, "cuando vino en su mejor momento en 1992".

Por contraparte, el punto más negro, sin lugar a dudas, "fue el accidente de Argentina (fue atropellado en 1994). Fue lo más malo y lo más triste".

Pero algo quedó pendiente: "Lo que me quedó por hacer, y me quedé con el sueño, fue lograr el primer lugar en el Ironman de Hawai. Estuve rasguñando el primer lugar, pero me voy contento por haber logrado los otros resultados". (Cooperativa.cl)