El presidente del Comité Olímpico de Chile (COCh), Neven Ilic, contó cómo se enteró del dopaje del ciclista Carlos Oyarzún y señaló que lamenta "muchísimo" el hecho, pero que así son las reglas en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015.

"Me enteré de esto durante el partido de voleibol playa del sábado. Le pedí a Jaime Agliatti (jefe de la misión chilena en Toronto) que hablara con el deportista, que estaba durmiendo. Se le dijo claramente y al día siguiente hablé con él y su señora", dijo Ilic.

"No sabían qué hacer ni cómo actuar. Yo he estado en todas las reuniones con WADA (Agencia Mundial Antidopaje) y los equipos preocupados en este tipo de prueba. Él estaba suspendido inmediatamente de los Juegos, no hay posibilidades de muestra B ni nada. Por eso le recomendé que retornara al país, que aquí no se podía hacer nada", añadió.

Reconoció que Oyarzún "pidió abrir la muestra B, así que se abrirá y comenzará un proceso que todos conocen".

En cuanto a la sustancia, "FG 4592", afirmó que "no la conozco bien, al parecer es nueva. Ni siquiera WADA sabe bien de qué se trata. Carlos está en Chile y veremos allá como solucionamos este problema".

"Yo estaba cerca de él. Le ha costado mucho surgir. Hemos necesitado ayurdarlo y apoyarlo mucho. Esta es su vida, de esto vive. El impacto que tiene para él y su familia es gigantesco. Yo personalmente lo lamento muchísimo, pero así son las reglas y estas se respetan siempre", finalizó.

El castigo mínimo que puede recaer sobre el chileno es de dos años, mientras que el máximo es de cuatro, por lo que quedaría fuera de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, competencia a la cual ya estaba clasificado. Es por eso que el nacional apelará a la sanción.