La selección italiana despidió un nuevo ciclo de duelos amistosos con el grito ahogado de una victoria, luego de igualar 1-1 con Holanda, cuadro que modificó el tablero a dos minutos del final de la cita en el Allianz Stadium de Turín.

El veloz inicio que ofreció la escuadra local este lunes fue suficiente para agitar las redes en los 3' con una estocada de primera de Andrea Belotti, aunque toda su acción fue anulada por darse en offside.

A partir de ahí, se tuvo que esperar hasta el último tercio para que los combinados reaccionaran. El primer tiempo, con juego parejo sobre la mitad del terreno y tímidos avances de Italia, cerró con apenas dos remates más por lado.

Para encontar la primera cifra, el recién igresado Simone Zaza (63') insitió ante la zona pequeña a los 66', y acabó celebrando gracias al rebote del un despeje de un defensa en uno de sus pies.

El ánimo alto de los azules de inmediato se transofrmó en nerviosismo por mantener el resultado al quedar con un jugador menos. Al intentar frenar con falta una jugada manifiesta de gol frente al área, Domenico Criscito recibió la roja directa (68').

Nuevos cambios de Holanda reforzaron su ofensiva, que con energía renovada salvó al honor en los 88', todo por un centro de Steven Berghuis que Nathan Aké convirtió con un estupendo cabezazo.

Luego de esta igualdad y la caída por 3-1 ante Francia, Italia deberá esperar hasta septiembre para tomar revancha en citas internacionales, mientras que la "naranja mecánica" volverá a concentrarse este sábado 9 de junio, cuando mida fuerzas con la selección mundialista de Perú.