El final del partido entre Colo Colo y Huachipato en el CAP de Talcahuano estuvo encendido. El equipo "acerero" festejó un gol en la última jugada para empatar el marcador 1-1 y el plantel del "Cacique" se sumergió en una frustración que acabó en fuertes discusiones con el dueño de casa en el túnel rumbo a los camarines.

Incluso el técnico Mario Salas perdió el control y tuvo un duro cara a cara con el DT rival Nicolás Larcamón, lo que obligó la intervención del gerente deportivo de Blanco y Negro Marcelo Espina, para separar al "comandante" de la revuelta.

Durante la conferencia de prensa posterior al encuentro, Salas acusó una falta de "uniformidad" en los criterios de los árbitros respecto al tiempo añadido, ya que el partido entre albos y negriazules se extendió hasta los 90+5', momento en que llegó el gol, cuando en realidad se habían establecido cuatro minutos extras.

Ante la consulta de los periodistas, Salas evitó referirse a los incidentes con Larcamón: "Lo que sucedió después queda entre nosotros".

Por su parte, el timonel argentino le quitó relevancia al hecho y afirmó: "Lo que pasa en el túnel, queda en el túnel".

En caso de que los incidentes queden registrados en el informe arbitral de Francisco Gilabert, los involucrados arriesgarán sanciones.