El capitán de la selección chilena, Claudio Bravo, valoró la victoria ante Paraguay, la que llegó en un momento complicado para la Roja, asegurando que apelaron a creer en el equipo para poder levantarse del mal presente y seguir con vida en Clasificatorias.

"Fuimos nosotros mismos, tuvimos la sensación de ímpetu que habíamos tenido durante otros partido. Fue muy similar al encuentro que tuvimos acá con Bolivia, donde merecíamos haber rescatado algo más. Pero también tuvimos esa sensación de hacer las cosas bien como cuando jugamos contra Brasil, aunque ahí no tuvimos fortuna para sacar un mejor resultado", indicó.

"Hoy nos dejo la gran sensación de haber competido, de haber hecho las cosas de buena manera, tanto atrás, en el centro del campo y en ofensiva. Creo que también apelamos mucho al espíritu, a creer en nosotros cuando las cosas no se están dando y nos vamos con una sensación buena", complementó. 

El arquero de la Roja agregó que previo al partido "estábamos con mucha ilusión, con muchas ganas. Teníamos un desafío importante de seguir en la pelea por la clasificación. Ahora viene un partido mucho más valioso e importante". 

Respecto al apoyo del público en San Carlos de Apoquindo, Bravo aseguró que se sintió "fantástico. Agradezco a toda la gente que vino a apoyar, más con la condición que nos toca jugar este partido donde a lo mejor la sensación de esperanza ya se estaba alejando. El hecho de llegar acá y sentir el cariño a la gente o previo al encuentro en el hotel, en el calentamiento; sentir cómo nos recibieron fue fantástico".

"Creo que eso también es positivo. Eso suma en todos los niveles de competencia y queda agradecer nada más, porque la sensación nuestra fue que la gente estuvo con nosotros en todo momento", agregó el jugador de Real Betis de España. 

En esa misma línea, agregó que "lógicamente que fue favorable. Es muy alentador que la gente esté con nosotros, más cuando las cosas no se te vienen dando. Veníamos de cosas negativas. Sabíamos que el escenario era complicado. Pero sentir a la gente apoyar y alentar en todo momento es fantástico. Eso también nos llena de energía, nos llena de ilusión. Agradezco también por el cariño que siempre nos brindan". 

Finalmente, aseguró que sigue creyendo en poder llegar al Mundial. "Estoy sentado acá con casi 39 años, teniendo buenas sensaciones cuando me toca jugar, imagínate lo que queda para los demás, que tienen menos edad, menos recorrido. Creo que somos, en cierta medida, los más grandes, los que tenemos que llenar el tanque de gasolina. Ellos (lo más jóvenes) corren con ilusión, con sacrificio. Debemos mostrale la manera de competir, de querer hacer las cosas de buena manera, creo que ese es el camino", cerró.