El plantel femenino de Rosario Central denunció al club por malos tratos, amenazas y discriminación a algunas futbolistas por su orientanción sexual. Dos jugadoras ya dejaron la institución.

El reclamo de las deportistas fue hecha al Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI), alegando que la entrenadora Roxana Vallejos echó del club a Maira Sánchez, supuestamete por besarse con una compañera.

"Las jugadoras y ex jugadoras de la Primera división de fútbol femenino nos organizamos para visibilizar una serie de hechos de hostigamiento que padecimos durante el último año. En reiteradas oportunidades hemos sufrido maltratos, amenazas, discriminaciones de género y hacia la diversidad sexual, actos que atentaron contra nuestra salud física y mental", expusieron las futbolistas en un comunicado.

"También vulneraron nuestros derechos como trabajadoras y a muchas nos dejaron fuera del club o sin actividades. Nadie nos dio respuesta. Es por eso que, agotando todas las instancias administrativas del club, recurrimos al INADI para llevar adelante las acciones pertinentes y resguardar nuestra integridad, física, mental y laboral", cerró el escrito.

La propia Sánchez y la arquera Micaela Bianchi también se pronunciaron de forma individual en redes sociales, señalando que se van del club por "motivos extrafutbolísticos".