La UEFA confirmó este viernes que el árbitro polaco Szymon Marciniak arbitrará la final de la Liga de Campeones, el próximo día 10 entre Manchester City y Inter de Milán en Estambul, tras las disculpas y aclaraciones de este sobre su participación en un acto del partido ultraderechista Confederación en Katowice.

La UEFA agradeció este viernes en un comunicado las "profundas disculpas y aclaraciones" remitidas por Marciniak en un escrito, en el que asegura que fue "gravemente engañado y que desconocía por completo la verdadera naturaleza evento" celebrado en Katowice el 29 de mayo y que "no sabía que estaba relacionado con un movimiento polaco de extrema derecha".

El organismo explicó que tras recibir una denuncia de la ONG "NEVERAGAIN" investigó "con la máxima seriedad" los hechos y solicitó aclaraciones urgentes al árbitro, cuya comunicación publicó en su totalidad "para responder a las preocupaciones y garantizar la transparencia".

Según Marciniak, de haber sabido la vinculación del acto con la extrema derecha "habría rechazado categóricamente la invitación". "Es importante comprender que los valores promovidos por este movimiento son totalmente contrarios a mis creencias personales y a los principios que me esfuerzo por defender en mi vida. Estoy profundamente arrepentido por cualquier percepción de que mi participación haya podido contradecirlos", trasladó el árbitro a la UEFA.

Ésta indicó también que se puso en contacto con la ONG denunciante tras las explicaciones de Marciniak, que pidió que mantuviera su función de árbitro de la próxima final de la Liga de Campeones, al considerar que su relevo iría contra la promoción de la lucha contra la discriminación.