En una decisión consensuada, la Conmebol y la Concacaf decidieron romper relaciones con Datisa S.A., empresa conformada por Torneos, Traffic y Full Play, y que era dueña de los derechos televisivos de la Copa América del Centenario, a disputarse en 2016 en Estados Unidos.

De acuerdo a lo expresado por la Confederación Sudamericana a través de un comunicado que se acordó "rescindir todos los derechos comerciales en posesión de Datisa para la venta de derechos de patrocinio y retransmisión asociados a la Copa América Centenario".

"Conmebol asumirá los referidos derechos comerciales mientras que conjuntamente con la Concacaf y en conjunto con el operador local del torneo van a identificar nuevos socios para comercializar y vender los derechos comerciales del torneo utilizando un proceso nuevo y transparente", se añade.

Datisa se había asegurado los derechos televisivos y comerciales de cuatro ediciones de Copa América: Chile 2015, Estados Unidos 2016, 2019 y 2023, no obstante, en mayo, la justicia estadounidense reveló que el contrato entre la empresa y la Conmebol incluía 110 millones de dólares en concepto de coimas, distribuidas entre 2015 y 2023.

De los 110 millones de dólares en coimas, los funcionarios judiciales norteamericanos dieron por pagados 40 millones: US$ 20 millones correspondientes a la firma del contrato y una cifra similar por la Copa América de 2015.