Sao Paulo, elenco brasileño que fue derrotado en las finales de la Copa Libertadores de 1974 y 1994 por equipos argentinos, espera que River Plate, al que se medirá en semifinales desde el próximo 22 de junio, no se convierta en otro verdugo en sus aspiraciones para conseguir el máximo título continental.

 

Sao Paulo, dos veces campeón de la Libertadores, fue impedido de conquistar el título de 1974 por Independiente de Avellaneda y el de 1994 por Vélez Sarsfield, y ahora tendrá que medirse con el elenco del atacante chileno Marcelo Salas.

 

"Es una rivalidad muy grande, que ha aumentado en los últimos años, pero estamos preparados para cualquier adversario", afirmó el técnico tricolor, Paulo Autori.

 

Sao Paulo llegó a las semifinales de la Libertadores al eliminar el miércoles a Tigres de México del atacante nacional Claudio Núñez, en tanto que River Plate se clasificó en la noche del jueves al vencer por 3-2 a Banfield.

 

El partido de ida entre ambos semifinalistas está previsto para el próximo miércoles 22 de junio en el Estadio Morumbí de Sao Paulo.

 

Autori considera difícil que Sao Paulo pueda vencer a River Plate por un resultado tan amplio como el que logró frente a Tigres en el partido de ida (4-0), pero afirmó que el club buscará la máxima ventaja posible para jugar con tranquilidad fuera de casa.

 

"Aquel resultado no es común en un partido de Libertadores, pero, de cualquier forma, vamos a buscar una amplia ventaja aquí en el Morumbí", afirmó.

 

El técnico no cree que, por sus características, River Plate opte por una estrategia defensiva en el Morumbí, lo que puede facilitar el trabajo de sus delanteros.

 

"Es un equipo que tiene un tipo de juego más abierto, con dos excelentes armadores, que son Marcelo Gallardo y Luis González. Por eso es un equipo que se adapta más a lo que podemos hacer", afirmó.

 

Además de tener a los argentinos entre sus verdugos en la disputa por la Libertadores, Sao Paulo ya tuvo una mala experiencia al medirse a un club argentino en la primera fase del torneo continental este año.

 

Tanto el partido en que venció a Quilmes en Sao Paulo como en el que empató en su visita a Argentina estuvieron marcados por las supuestas ofensas racistas sufridas por su delantero Grafite.

 

Desde 1972, cuando participó por primera vez en una Libertadores, Sao Paulo se ha enfrentado en 15 oportunidades a clubes argentinos por el torneo continental y ha logrado siete victorias, siete derrotas y un empate. (EFE)