Real Madrid tuvo otra "noche mágica" en el "Santiago Bernabéu" y logró una épica y agónica remontada para vencer 3-1 a Manchester City (6-5 en el global) e instalarse en la final de la Champions League, donde se medirá en el partido decisivo a Liverpool.

En una pareja primera parte, donde ambos equipos gozaron de llegadas a los arcos aunque sin inquietar en demasía las porterías de Courtois y Ederson, respectivamente, las emociones se trasladaron de lleno a la segunda mitdad, específicamente en la parte final.

Riyad Mahrez silenció a toda la parcialidad del "Santiago Bernabeú" con un zurdazo al primer palo en los 73', en un gol que pareció derrumbar a Real Madrid, que se sostuvo únicamente gracias a su arquero, autor de una gigante tapada a un disparo de Grealish, a quien previamente le sacaron un remate desde la línea. 

Con más corazón y gallardía que fútbol, los de Carletto Ancelotti apelaron a la épica y lograron empatar el partido vía Rodrygo con el tiempo cumplido (90').

Manchester City no logró despertar tras el tanto y nuevamente se descuidó para el segundo del atacante brasileño, quien puso en ventaja a los españoles e igualó el global con golpe de cabeza (91').

Con los ingleses descolocados y un Real Madrid con ganas de más, Ruben Dias bajó a Benzema en el área en el inicio del primer tiempo del alargue. El atacante francés no desaprovechó la pena máxima (95') y marcó el 3-1 final, resultado que los metió en la final de la Champions tras cuatro años.

En el partido decisivo, los "merengues" enfrentarán a Liverpool el 28 de mayo en París. El duelo reeditará la final de 2018, último trofeo de Real Madrid en el torneo, justamente ante los "reds"