El ya mítico delantero brasileño Romario quiere llegar a los mil goles como profesional, pero no a cualquier costo, ya que el jueves se negó a disputar un amistoso frente a un equipo de veteranos alemanes al darse cuenta de que sus jugadores eran aún mayores que él.

 

Romario, que el mes pasado completó 40 años y se resiste a jubilarse, llegó a saltar a la cancha del Estadio Sao Januario de Río de Janeiro para el duelo junto a Vasco da Gama, pero al ver a los rivales dio media vuelta y regresó al vestuario.

 

Los jugadores de LTS Bremerhaven, equipo inscrito en la liga alemana de veteranos y con un promedio de 40 años de edad, lucían calvas más pronunciadas que las de Romario y abultados abdómenes, poco comunes entre futbolistas.

 

Ante la escena calificada como "patética" por la prensa deportiva brasileña, Vasco da Gama canceló el amistoso e improvisó un partido de entrenamiento entre algunos de sus titulares y los alemanes.

 

Los germanos, entre ellos un lateral de 54 años, tan sólo jugaron 30 minutos, tiempo suficiente para sufrir cinco goles en contra y para que el portero sufriera una lesión que lo mandó a la enfermería, mientras los demás se derretían bajo el sol de Río de Janeiro.

 

Vasco da Gama, en campaña para ayudar a Romario a llegar al millar de goles, atribuyó la situación a un malentendido y dijo haber negociado un amistoso con un club alemán de tercera división, sin saber que era de la liga de veteranos.

 

Sin embargo, el club de Río de Janeiro se ha manifestado dispuesto a todo para permitir que su máxima estrella realice el sueño de llegar a los mil goles.

 

Además de programar amistosos con equipos brasileños de tercera división, el club anunció que está preparando una gira internacional en junio próximo por Norteamérica y Centroamérica. (EFE)