La selección argentina de fútbol regresó este jueves a Bilbao tras su triunfo la víspera frente a Italia (3-0) en la Finalissima de Wembley, para ejercitarse en las instalaciones del Athletic Club en Lezama con vistas al amistoso del próximo domingo en Pamplona ante Estonia.

La expedición de la Albiceleste volvió a la ciudad deportiva vizcaína en la que preparó la pasada semana el partido intercontinental para completar una sesión que fue de recuperación, en el gimnasio, para los titulares en el estadio londinense y algo más exigente para el resto de futbolistas.

Según informó la AFA en el entrenamiento desarrollado a puerta cerrada los jugadores que no jugaron de inicio realizaron sobre todo "movimientos en espacio reducido, recuperación tras pérdida y fútbol formal".