Problemas técnicos en su moto provocaron que el chileno Jeremías Israel abandonara en la quinta y penúltima etapa del Rally de Marruecos disputada entre Zagara y Marrakech.

El piloto oficial del equipo Honda Racing marchaba en el grupo de vanguardia cuando encontró a su coequipo portugués Paulo Goncalvez muy afectado tras sufrir una fuerte caída cuando intentó superar al australiano Toby Price.

Cayó sobre unas piedras, quedando muy golpeado. Israel lo ayudó, ya que apenas podía llevar la moto y especialmente para sortear un río para pudiera llegar al CP1, donde fue rescatado el portugués por un helicóptero que lo trasladó al hospital de Ouarzazate.

El chileno intentó retornar  a la competencia, pero se encontró con un problema con el partidor de la moto no pudiendo poner en marcha el motor. Por ello volvió a bivuac en la moto de Goncalvez por carretera, recorriendo más de 350 kilómetros y su máquina quedó en ese sector, que dificultaría que llegara al parque de servicio para su reparación y pudiera largar este jueves.

"Iba bien ubicado en el grupo de vanguardia cuando me encontré con Paulo (Goncalvez) que estaba muy golpeado. Al parecer por la caída tenía algunas costillas quebradas y dolores muy fuertes en la espalda. Apenas se podía mover. Lo acompañé un buen trecho hasta llegar al CP1 que estaba como 130 kilómetros y desde allí lo rescataron".

"Voy a tratar que me autorice reenganchar para la etapa final, ya que todo kilometraje en carrera es una experiencia importante. Hay que considerar que esta moto fue construida para el Dakar, se encuentra en pleno estado de desarrollo", agregó.