La hinchada de Coquimbo Unido que llegó hasta Santiago para ver el vital partido de su equipo por la permanencia en la Primera B ante Magallanes causaron serios destrozos en la sede de la ANFP.

Tras la suspensión del duelo ante la Vieja Academia, por la falta de suministro de agua en en el Estadio Municipal de San Bernardo, los barristas se trasladaron hasta Quilín y protagonziaron disturbios en la sede del fútbol chileno reclamando que el duelo ante Barnechea, que también lucha por no perder la categoría, y Puerto Montt también debió ser aplazado por razones deportivas. 

También reclamaron que Deportes Concepción debe descender por sus deudas y problemas financieros.

Otros grupos de fanáticos de Coquimbo se tomó la Ruta 5 Norte luego que Carabineros los detuvo ante la suspensión del partido ante Magallanes.

La ANFP informó que ya acudió a la Justicia para tomar acciones legales contra los responsables de lo que calificó como un "acto de vandalismo" e informó que ningún funcionario resultó herido. 

Hugo Muñoz, director del organismo, sostuvo en Cooperativa que "repudiamos de la forma más enérgica esta manifestación de vandalismo y barbarie. Cosas como esta alejan a la familia del estadio" y añadió que "por el momento no hay antecedentes que permitan dirigirnos contra el club Coquimbo Unido, estoy seguro que son los primeros en repudiar esto".