El joven futbolista togolés Kossi Koudagba, de 25 años, falleció luego de una fulminante batalla contra la malaria, enfermedad que contrajo tras un viaje a su pueblo natal, según informó la BBC.

El ariete, quien fue goleador dos veces en la liga de Togo y además ganó el título en el 2019, viajó a Dévié, desde Kara, donde defendía al club ASC, luego del receso por el coronavirus.

En ese lugar cayó enfermo de malaria y murió, según confirmó la Federación de Fútbol togolesa: "En estas dolorosas circunstancias el Comité Ejecutivo de la FTF quiere saludar la memoria de este jugador, cuyas cualidades dentro y fuera del campo eran conocidas por todos".

Según dijo el entrenador de ASC Kara, la única preocupación de Koudagba era "poner la pelota en el fondo de la red y eso lo estaba haciendo muy, muy bien".