Después de recibir de las manos del legendario Bjorn Borg su segundo título de Roland Garros y su decimonoveno en torneos Grand Slam, el serbio Novak Djokovic, número uno del mundo, avisó de que no quiere "parar" después de ganar este certamen.

"Ha sido un esfuerzo de equipo, estoy muy orgulloso, contento, no quiero parar aquí, quiero volver al podio de ganador al menos una o dos veces más", dijo "Nole" en la ceremonia de premiación. 

Recordó la "batalla" que también enfrentó en las semifinales ante Rafael Nadal y elogió al oponente al que venció este domingo, el griego Stefanos Tsitsipas, 14 años más joven.

"No soy tan joven como Stefanos y tengo que buscar cada día nuevas motivaciones", señaló el serbio, de 34 años, después de que sonase el himno de su país mientras ondeaba la bandera serbia en la "Philippe Chatrier".

"Entiendo por lo que estás pasando, de estos partidos es de los que más se aprende. Saldrás fortalecido de esta con la ayuda de tu equipo", agregó Djokovic, quien le pronosticó "muchas" victorias en "grandes" en el futuro.

Tsitsipas tuvo dos sets de ventaja, pero el campeón serbio los remontó. "Estaré contento con vencer en mi carrera la mitad de lo que tú has ganado", dijo al ateniense.