El árbitro Francisco Soriano consignó fuertes insultos y falta de condiciones óptimas en su camarín tras el duelo entre Real San Joaquín y San Marcos de Arica, que terminó 0-2 en La Pintana.

El juez aseguró en su informe que "una vez finalizado el partido, cuando nos dirigíamos a camarines, en trayecto había una persona de civil (sin identificarla con un equipo) que nos insulta diciendo 'son terribles malos árbitros conchasumadres, ladrones culiaos (sic)', siendo retirada por guardias a exigencia de nosotros".

También sostuvo que el "camarín de árbitros no cuenta con agua caliente".

Por otra parte, en el duelo entre Lautaro de Buin y Deportes Valdivia (1-2), también llevado a cabo en La Pintana, el réferi Fabián Pizarro señaló que "el club local no presenta computador y tampoco impresora en el tiempo estipulado. 40 minutos antes nos facilitan un computador. No hay conexión a señal wi-fi. Arbitro principal presta su computador para completar sistema Comet".

Además, añadió que "Lautaro de Buin hace entrega de su alineación 55 minutos antes del partido (el reglamento indica que debe ser una hora)".