El técnico de River Plate, Marcelo Gallardo, bajó al vestuario de su equipo para hablar con sus jugadores en el entretiempo, pese a que la sanción de Conmebol se lo impedía y lo obligaba a quedarse en el palco, algo que ya fue reclamado por Gremio.

Las cámaras lo captaron y un fotógrafo se acercó para sacarle una foto.

Luego de consumada la victoria, Gallardo reconoció que fue al camarín: "Admito que lo hice. Sentí que los jugadores lo necesitaban y yo también", dijo.

Ante los evidentes hechos, Gremio hizo patente su reclamo ante Conmebol y el cuadro millonario arriesga incluso perder la llave.