El técnico de Real Madrid, Zinedine Zidane, evitó mostrarse confiado con la posibilidad de que su equipo venza fácilmente a Kashima Antlers, en el papel más débil, en la final del Mundial de Clubes de Japón que ambos equipos jugarán el domingo.

"Lo más importante para nosotros es descansar porque tenemos pocos días hasta el partido del domingo. Hoy conseguimos pasar y pensamos solo en la final y en el trofeo que nos podemos llevar. Venimos de muy lejos (para ganarlo). Pero aún nos queda un partido", dijo el francés después de que su equipo venciera en la semifinal del torneo a América de México por 2-0.

Preguntado sobre si ha estudiado a Kashima, un desconocido en Europa, afirmó que su equipo técnico ya lo ha observado.

"No se sabe nunca lo que va a pasar pero nosotros miramos siempre los (otros) partidos porque es un rival que te puede tocar y es importante saber con qué nos vamos a enfrentar", añadió.

Zidane dijo que no se ha fijado en ningún jugador nipón en especial y valoró al "conjunto en general", que el miércoles dio la sorpresa al imponerse por 3-0 en la otra semifinal a Atlético Nacional de Medellín.

"Sabemos que va a ser otro partido complicado. Son además japoneses y juegan en casa", aseguró.