El arquero chileno Claudio Bravo confesó en un registro audiovisual publicado por Dugout que para él fue difícil su primer año en Manchester City, donde llegó de la mano de Josep Guardiola, debido a que los hinchas del equipo estaban acostumbrados a otro juego del arquero.
“Me tocó el primer año y no es fácil en ese sentido, porque la gente estaba acostumbrada a otro juego, que el portero controlara y pegara el balón lo más largo posible, y de a poco se fue acostumbrando”, indicó al mencionado medio especializado.
Según el meta chileno, en virtud de la “filosofía” que implementó Guardiola, los seguidores del equipo celeste “vieron que también es posible construir ocasiones de gol y conseguir goles en base a ese tipo de juego”.
“Hoy en día, la gente creo que disfruta cuando ve a los porteros del club jugando desde atrás, sacando el balón limpio sin sentir la presión que tienen los porteros con esa clase de juego”, completó.
Bravo cumple su contrato con Manchester City al final de la presente temporada.