Indignación causó en la Serie A, los insultos racistas que recibió el defensor senegalés Kalidou Koulibaly, en el duelo entre Inter de Milán y Napoli, en el Estadio San Siro, el pasado miércoles, lo que motivó una gran cantidad de críticas por parte de los entrenadores de la liga italiana.

El hecho, que le valió dos fechas sin público al elenco milanista, fue criticado por el propio DT del equipo Luciano Spaletti, quien se mostró decepcionado por el hecho.

“Condeno con fuerza lo ocurrido el miércoles. Llegó el momento de decir ‘basta' con el racismo, la discriminación o cánticos que evocan tragedias el pasado. Nuestro mensaje es claro. Nuestro club ama las diferencias”, aseveró el técnico.

Por su parte, el estratega de Juventus, Massimiliano Allegri, agregó que “no tolero ninguna forma de racismo ni de insulto sobre tragedias o muertos. Hay que educar a los niños en las escuelas. El deporte y el fútbol son educativos, pero es un camino que debemos hacer todos juntos”.

Otro que cuestionó el hecho fue el adiestrador de Milan, Gennaro Gattuso, quien aseguró que “creo que es correcto parar el partido, pero hay que entender que son cuatro imbéciles, no todo el estadio. Lamentablemente no es la primera vez que ocurre algo de este tipo. Somos todos iguales, hace falta respeto”.

Finalmente, Filipo Inzaghi, DT de Bologna de Erick Pulgar y su hermano Simone (DT de Lazio), coincidieron en sus respectivos mensajes, destacando que esperan que los responsables “terminen en la cárcel“.