El árbitro internacional chileno Pablo Pozo inauguró este jueves de forma oficial la presencia nacional en los Juegos Olímpicos de Beijing al dirigir el partido en que Holanda y Nigeria igualaron sin goles en choque correspondiente al Grupo B. 

El referí nacional tuvo un buen cometido en la igualdad entre la escuadra europea y la africana, al poner freno ajustadamente a la pierna fuerte desplegada por ambos equipos. 

En su desempeño a lo largo de los 90 minutos reglamentarios el hombre de negro mostró cuatro tarjetas amarillas y una tarjeta roja, al holandés Evander Snoen. 

Pozo está acompañado en la cita de los cinco anillos junto a sus asistentes Patricio Basualto y Julio Díaz, y el cuarto juez Néstor Mondría.