El alemán Nico Denz (Bora Hansgrohe) fue el ganador de la duodécima etapa del Giro de Italia, disputada entre Bra y Rivoli, de 179 kilómetros.

Denz fue el más rápido entre los tres fugados que se disputaron la etapa al embalaje, invirtiendo en meta un tiempo de 4h18'11”, a una media de 43 kilómetros por hora.

La segunda plaza fue para el letón Toms Skujins (Trek) y la tercera se la adjudicó el australiano Sebastian Berwick (Israel).