El finlandés Valtteri Bottas (Mercedes), ganador hace dos semanas en Australia, afrontará por primera vez en su carrera un Gran Premio como líder del Mundial de Fórmula 1 este fin de semana cuando se desarrolle el GP de Bahrein, en el circuito de Sakhir, donde el domingo se disputará una carrera nocturna.
Bottas, de 29 años y que afronta su séptima campaña en la categoría reina, sorprendió en el estreno de Melbourne, donde encabezó, esta vez por delante de su compañero, el quíntuple campeón mundial inglés Lewis Hamilton, un nuevo doblete de Mercedes, en una prueba en la que el holandés Max Verstappen (Red Bull) fue tercero.
El finés entra en el circuito de las afueras de Manama -la capital del archipiélago arábigo- como líder de un Mundial que hasta ahora han ganado tres de sus compatriotas: Keke Rosberg, en 1982; Mika Hakkinnen, en 1998 y 1999; y Kimi Raikkonen, en 2007.
El piloto de Nastola, que a buen seguro aspira a emular a sus paisanos, sorprendió en la salida a Hamilton -su jefe de filas los dos años pasados-, que había arrancado desde la ‘pole'; y ganó con enorme claridad (20 segundos) en Albert Park.
Donde, además, se anotó un punto ‘extra', al marcar la vuelta rápida -una de las novedades de la temporada, empleada por última vez en 1959-, por lo que lidera el certamen con 26 puntos, ocho más que su compañero; y con 11 sobre Verstappen.
Los dos Ferrari del alemán Sebastian Vettel y el monegasco Charles Lecrerc ocuparon la cuarta y la quinta plaza. Un arranque que se antoja muy flojo para la escudería más laureada de la historia de la F1, que lleva sin ganar el título desde que lo lograse por última vez Kimi, en 2007.
Vettel, que entre 2010 y 2013 lideró el cuatrienio glorioso de Red Bull y ganador, de rojo, los dos últimos años en Sakhir -un circuito de 5.412 metros, al que el domingo está previsto dar 51 vueltas para completar 308 kilómetros-, debe apuntar alto en la pista en la que nadie ha ganado tantas veces como él (4).