Universidad de Chile consiguió un empate con gusto a poco frente a San Lorenzo, por 1-1 en el Estadio Nacional, y quedó con la obligación de ganar o empatar por dos goles o más en la revancha, que se jugará la próxima semana en Argentina.

Los “azules” y la visita llevaron a cabo un partido muy friccionado en el primer tiempo, en el que bien pudieron quedar en desventaja en los ocho minutos, con un cabezazo de Fraco Di Santo, y en el que también pudieron abrir la cuenta con un tiro libre de Mario Sandoval y un remate de media distancia de Marcelo Cañete.

En el segundo tiempo, el “Ciclón” comenzó con todo y también estuvo cerca del primero con un cabezazo de Alejandro Donatti, que cabeceó prácticamente en área chica, y terminó desviando de forma increíble (48′).

Más tarde, llegaron las incidencias más importantes, dado que en los 61 minutos se fue expulsado el defensa Diego Braghieri en los forasteros, por una criminal patada a Joaquín Larrivey, que en primera instancia el árbitro consideró para tarjeta amarilla, aunque después de muchos reclamos terminó sacando la roja.

Esto dio confianza a los universitarios, que comenzaron a llegar más a la portería rival y que en los 75′ consiguieron la apertura de la cuenta, con un impecable golpe de cabeza de Angelo Henríquez, que dejó sin opciones al ex portero de Audax Italiano José Devecchi.

No obstante, la alegría duró muy poco y la igualdad llegó tres minutos más tarde, con una oportuna aparición de Di Santo, mano a mano con el portero Fernando De Paul, decretando el resultado definitivo.

Sobre el final del compromiso, los estudiantiles se fueron con todo en busca de la victoria, e inquietaron con un nuevo disparo de Cañete y una gran mediavuelta de Augusto Barrios, que otra vez provocó el lucimiento de Devecchi, en la última del partido.

La vuelta será el próximo miércoles en el Estadio “Pedro Bidegain” a las 21:30 horas (00:30 GMT), aunque el fin de semana el “Cuervo” tendrá un duelo por la Copa de la Liga Argentina contra Banfield.