Barcelona y Sevilla empataron 1-1 en su partido aplazado de la cuarta jornada en el Sánchez-Pizjuán, donde los hispalenses, que jugaron con 10 jugadores casi media hora por una acción absurda de Jules Koundé que le costó la expulsión, malograron su duelo pendiente para presionar al líder Real Madrid; y los azulgranas siguen fuera de zona ‘Champions'.

Tras un partido con escasas ocasiones, los goles llegaron en el primer tiempo en jugadas de estrategia, marcados por el argentino Alejandro “Papu” Gómez sobre la media hora y el uruguayo Ronald Araújo en el minuto 45, tras sendos córneres. A partir de ahí, el Sevilla, con diez por la roja a Koundé, se defendió bien ante un Barcelona que estrelló un balón en un poste por medio de Dembélé, su hombre más incisivo.

Se medían dos clásicos de LaLiga en un duelo con connotaciones especiales, quizás con los papeles cambiados respecto a las últimas décadas, pues Sevilla, segundo, se jugaba colocarse a 3 puntos del líder, Real Madrid, y Barcelona, octavo y con muchas más urgencias, resurgir para meterse en zona ‘Champions' tras sacar sólo cuatro puntos de los últimos nueve.