El prestigioso medio francés L'Equipe realizó una profunda radiografía al chileno Alexis Sánchez ante el interés de Olympique de Marsella por llevárselo y puso dudas sobre las condiciones actuales de “Maravilla”.

El título del artículo fue: “Rastreado por Olympique de Marsella, ¿Alexis todavía vale la pena?“, añadiendo que “Marsella está discutiendo con el entorno del chileno (146 partidos internacionales, 48 goles) para negociar una posible llegada este verano“, detallan, y tras eso se preguntan: “¿se puede seguir considerando como un auténtico refuerzo?”.

Además , lo consideraron “frágil, pero experimentado“, ya que “en los últimos años, el ex-Gunner ha sido víctima de lesiones recurrentes, muchas veces musculares. Algo para enfriar, necesariamente, dadas sus exigencias salariales”.

También señalaron que “de líder ofensivo a comodín de lujo”. ¿Cómo dicen? “Si aún no ha entrado en la categoría de veteranos, el “Niño Maravilla” tiene sin duda la cima de su carrera a sus espaldas. Digamos que tuvo sus mejores años, al menos desde el punto de vista estadístico, entre 2010 y 2017, cuando pasó del Udinese al Arsenal, pasando por el Barça“.

“Luego, su marcha al Manchester United, por más de 30 M€, en el invierno de 2018 nunca fue realmente rentable (5 pequeños goles en casi 50 partidos). Su tiempo de juego se resintió. Pese a todo, el chileno logró -un poco- reanimarse con el Inter, donde aterrizó en el verano de 2019 (primero cedido, luego liberado definitivamente)”, añadió.

“En Milán se ha convertido sobre todo en un comodín, una suerte de número 3 en la jerarquía ofensiva, por detrás de la dupla Lautaro Martínez-Romelu Lukaku. Aunque menos utilizado (unos 1.000 minutos por temporada en la Championship), Alexis ha sabido encontrar su sitio y ser decisivo, sobre todo durante el título conquistado en la 2020-2021 (7 logros y 7 asistencias en la Serie A)”.

Inter no ha destrabado la salida de Sánchez de su plantilla, porque debe pagarle 7,5 millones de euros de indemnización, los mismos que tiene de salario si es que se queda, aunque con pocas posibilidades de ser titular.