El partido entre Leicester City y Tottenham Hotspur que se debía disputar este jueves fue suspendido debido al elevado número de contagiados en los “foxes”.

Este es el cuarto partido de la Premier League aplazado en los últimos siete días, después del Brighton-Tottenham, el Brentford-Manchester United y el Burnley-Watford.

Según explicó la Premier League en un comunicado, el aumento de positivos entre los jugadores llevó a tomar esta decisión. Además, el centro de entrenamiento de los de Leicestershire se cerró durante 48 horas para contener el brote.

“Leicester pidió este jueves que el partido se suspendiera debido a un brote de covid. El equipo se ha quedado con un número insuficiente de jugadores para disputar el encuentro”, añadió.

El técnico de Leicester, Brendan Rodgers, aseguró este miércoles en rueda de prensa que la primera petición que hicieron para que el partido se suspendiera fue denegada, como así lo fue también la del fin de semana en el duelo contra Newcastle United.