Dominic Thiem se estrelló este sábado frente al experimentado Novak Djokovic. El quinto clasificado en el ránking mundial, que se entrena bajo la dirección del chileno Nicolás Massú, jugó de igual a igual ante el número uno, sin embargo, el serbio supo resolver puntos en momentos claves y se llevó la victoria de su encuentro por las semifinales del Masters 1.000 de Madrid con un marcador de 7-6(2) y 7-6(4).

El rival de “Nole” por la corona será el local Rafael Nadal (2°) o el griego Stefanos Tsitsipas (9°), que jugarán su llave a las 15:00 horas.

Se trató de la sexta semifinal en Madrid de Djokovic, la 64 de un Masters 1.000, y ahora luchará en su final 48 de estos prestigiosos torneos, de las que ha ganado 32 y perdido 15.

Para Thiem era la tercera ocasión que lograba las semifinales en la Caja Mágica, con dos finales perdidas en los últimos años. Había llegado a Madrid con su primer título de esta categoría, en Indian Wells, donde venció en la final a Roger Federer, y siendo el verdugo de “Rafa” en Barcelona, donde salió campeón.

El descanso tras darse de baja su rival en cuartos, el croata Marin Cilic, por una indisposición alimenticia, sentó bien a Djokovic que saltó a la pista fresco, física y mentalmente, dispuesto para la batalla y con el deseo de resarcirse de las dos últimas derrotas ante Thiem, en Roland Garros 2017 y en Montecarlo el año pasado.

Thiem, por su parte, había tenido que pelear durante dos horas y 10 minutos este viernes, y salvar dos puntos de partido ante Federer. Además de ello sumó desgaste por competir en el cuadro de dobles, donde llegó también a las semifinales junto con el argentino Diego Schwartzman.

Clave en el partido fue la entereza de “Nole”, que estuvo abajo 3-1 en el primer set para forzar luego el desempate, donde tomó ventaja de inmediato para dominar este juego corto por 7-2 y hacerse con el primer parcial después de 64 minutos..

Poco le importó que el juez de silla le advirtiera dos veces por su retraso a la hora de servir. Djokovic mantuvo su solidez ante la potencia de Thiem, tanto de derecha como de revés, estirándose en la pista y aceptando que el austríaco era superior por momentos.

En el segundo set, y ganando puntos extraordinarios a base de fuerza, Thiem se colocó con ventaja de 4-2, pero de nuevo el número uno del mundo sacó a relucir su casta y aprovechó sus opciones al máximo para romper dos veces seguidas, cuando el saque del austríaco flojeaba.

Djokovic llegó a sacar para ganar el partido con 6-5 pero su servicio falló en ese momento crucial, entregándolo con su primera doble falta. En el desempate fue Thiem el que falló de nuevo, dejando escapar otra vez una gran oportunidad.