El director técnico de Unversidad Católica, Ariel Holan, valoró el gran presente que viven los delanteros Marcelo Barticciotto y Alexander Aravena, formados en el club, que hoy están a préstamo y vienen de ser titulares en la Roja sub 23. 

“Los dos debutaron conmigo en el proceso anterior, les tengo muchísimo cariño y estima personal. Y deportivamente los valoro mucho como delanteros, tienen un gran futuro los dos, con características diferentes”, apuntó en conferencia de prensa. 

Por supuesto que al entrenador le gusta tener futbolistas de esta jerarquía y sobre todo esta proyección, pero claramente eso no depende solamente de mí. Hay decisiones institucionales y personales de los futbolistas, pero me gustaría contar con ellos”, añadió.

En esa misma línea contó que “con Bruno hablé personalmente antes de que él se fuera. Cuando yo llegué, lamentablemente Alexander ya no estaba. Pero hay que respetar las decisiones personales de los futbolistas, porque ellos tienen una mirada de su carrera, la gente que los asesora, sus representantes y sus padres”.

“Los chicos también tienen que velar por su interés y su carrera. Son muchas cuestiones que hacen que las decisiones no dependan de una sola parte, entrenador, futbolista o institución, sino de una ingeniería que no es sencilla malgamar para que se pueda lograr el deseo de un entrenador”, complementó. 

Por su parte, sobre Daniel González, que también jugó con la Roja sub 23 expuso que “lo veo bien, es un chico que es juvenil, recién llega al club y está jugando algunos partidos en primera división. Tiene un tremendo futuro, esperemos que a medida que vaya ganado experiencia y entrenamientos, pueda afianzarse y darle al club lo que pensamos que puede dar”.

 Fnalmente, se refirió al presente de su equipo: “Hay un crecimiento en el rendimiento individual del equipo, porque vienen de distintas realidades y en la medida que fuimos sumando minutos de entrenamiento y partidos, individualmente fueron levantando su nivel. Eso repercute en le sistema colectivo del juego, que también (se eleva) en la medida que fuimos entrenando en función de la identidad que queremos que el equipo tenga“.