El arquero Brayan Cortés entrenó con normalidad este jueves junto al plantel de Colo Colo, luego que el miércoles por la noche fue víctima de un violento asalto cuando cargaba combustible en Calera de Tango.

Según informamos Al Aire Libre en Cooperativa, el portero del cuadro “popular” llegó a las prácticas durante la presente jornada, al día siguiente en el que un grupo de delincuentes lo golpeó, amenazó con armas de fuego y robó su vehículo.


Cortés se mantuvo en contacto con el presidente de Blanco y Negro, Alfredo Stöhwing, quien le ofreció la colaboración que fuera necesaria.

Colo Colo prepara su próximo desafío, ante Huachipato, programado para el sábado.