Un radical cambio sufrirá la liga mexicana. Enrique Bonilla, presidente de la Liga MX, anunció este viernes la eliminación de los decensos y el torneo de ascenso por los próximos cinco años, con la idea de dar paso a una liga de desarrollo.

Por esta misma decisión, Bonilla explicó que esta eliminación conlleva a dar por terminada la temporada 2019-2020 del ascenso, sin que haya un campeón, a partir de lo cual se creará la llamada liga de desarrollo, un formato de división que sirva como semillero de jugadores.

El directivo, quien se recuperó de coronavirus, señaló en una videoconferencia que la Asamblea de la División tomó la decisión debido a que el torneo de ascenso perdió ingresos en las últimas temporadas, tanto en los derechos de televisión como en patrocinios, ganancias por taquilla y en ganancias por día de partido.

“La asistencia a los estadios descendió a un promedio por partido de 8.000 personas en el mejor de los casos”, explicó el directivo, quien reconoció que la crisis financiera en el país acrecentó los problemas para la división.

“Varios de los proyectos actuales se encuentran cerca de la quiebra, con peligro de desaparecer por falta de recursos frescos y con la necesidad de cubrir un déficit financiero anual”, agregó.

Bonilla, además, precisó que destinarán 10 millones de dólares a repartir a los equipos que están en el Ascenso, para apoyar su crecimiento y consolidar su participación en esta nueva división de desarollo.

Esta medida afecta a tres jugadores chilenos que militan en esa categoría: Sergio Vergara y Diego Bravo, del club Celaya, e Isaac Díaz en Cafetaleros de Chiapas.