El partido que este jueves Peñarol le ganó 2-0 a Progreso por la liga uruguaya como visitante tuvo un curioso episodio en la previa, puesto que las constantes lluvias en Montevideo obligaron a pintar nuevamente las líneas de la cancha, con un resultado curioso.

Al parecer ningún experto estaba presente para llevar a cabo la acción y quien la realizó no dejó conforme al árbitro Daniel Fedorczuk, el que pidió un nuevo retoque, que fue peor que el anterior.

La línea que quedó pintada de forma definitiva sorprendió a los espectadores del cotejo que hicieron viral la fotografía y llenaron de comentarios el poco cuidadoso trabajo.