El Estadio Mártires de la Revolución de Febrero de 2011, que honra el levantamiento que acabó con la dictadura de Muamar al Gadafi, se prepara para acoger este jueves el primer partido oficial de fútbol que se disputa en Libia desde que en 2014 estallara la guerra civil.

Será en Bengasi, segunda ciudad en importancia y capital del este del país, donde la selección local y Túnez se enfrenten en un encuentro de clasificación para Copa de África de Naciones (CAN), que se celebrará el próximo año en Camerún.

“Es un paso más hacia la normalidad y la estabilidad del país, y una buena señal para el futuro”, explicó a la Agencia EFE un miembro del nuevo Gobierno Nacional de Unidad transitorio (GNU), elegido hace apenas una semana tras un largo proceso de diálogo y reconciliación tutelado por la ONU que ha logrado unificar el país tras siete años de guerra civil y división política.