El volante de Universidad Católica Luciano Aued analizó su presente en el club y reveló su relación con los más jóvenes del club, a los que les inculca la lectura.

“A los chicos les insisto mucho para que lean y se nutran desde ese lado, para que se les abra un poco más la cabeza y puedan pensar más allá de una pelota”, confesó a El Mercurio.

Aued agregó que “tenemos varios chicos que laburan muchísimo, escuchan y son humildes. Es algo para rescatar y valorar, porque no es habitual”.

En esa misma línea detalló que “con los que más vínculo he formado es con Ignacio Saavedra, César Munder y Diego Valencia. Tenemos un grupo donde nos mandamos notas, documentales o algún libro para recomendar”.

Sobre la fórmula del éxito de la UC, dijo que “encontramos una forma de ser competitivos y achicar el margen de error para estar más cerca de los objetivos. Tratamos de salir rápido de la derrota”.

El técnico que viene se encuentra con un club ordenado, tranquilo. Hay grandes instalaciones, un lugar de trabajo buenísimo y un clima muy bueno con exigencias altas”, añadió.

Consultado por su relación con la dirigencia, dijo que “quiero dejar y aportar cosas para que el club crezca. Tuve la suerte de que el club me escuchó. Y no es solo conmigo, sino con muchos de plantel. Tiene que haber ida y vuelta con el jugador, para saber qué piensa y cómo puede aportar”.

En otros temas, repasó la depresión que sufrió en Gimnasia y expresó que “cuando descendió el equipo, me agarró muy fuerte. No quería salir de mi casa. Le daba importancia a las críticas, ahora ya no”.

Por último, sobre el desafío de Copa Libertadores señaló que “depende de un montón de factores. Esperemos el sorteo, veamos cómo nos toca y ahí tendremos un panorama más claro”.

Compitiendo año a año contra rivales de gran calidad, el club crece por la cantidad de dinero que ingresa y eso se ve reflejado en el plantel por la calidad de jugadores que pueden llegar”, cerró.