Universidad Católica consiguió este sábado el primer tetracampeonato de su historia al consagrarse en el Campeonato Nacional 2021, un torneo en el que el cuadro cruzado fue de menos a más, en una campaña que tuvo un irregular comienzo con Gustavo Poyet en la banca, pero que mejoró sustancialmente con el gran gestor del título: Cristián Paulucci. 

Tras la salida de Ariel Holan de la banca cruzada tras coronarse el 2020, obligó a la dirigencia a buscar un reempazante a la altura del argentino y lo encontró en Uruguay con Gustavo Poyet, de amplio recorrido en el fútbol inglés.

La llegada del “charrúa” prometía en San Carlos de Apoquindo pues su experiencia europea asumía un salto de calidad en un equipo que arrastraba varios éxitos a nivel local, pero que no había podido demostrar su dominio en Chile en el plano internacional. 

En su primera experiencia como DT, Poyet le dio el ascenso a la Championship de Inglaterra a Brighton & Hove Albion. En su campaña en la segunda categoría también cosecharía positivos resultados, quedando bastante cerca de llegar a la Premier League.

Con 194 partidos dirigidos y un 54,47 por ciento de rendimiento, el sudamericano dejó al Albion para arribar en 2013 a Sunderland lugar donde también cumplió con saldos positivos, además de llegar a la final de la Copa de la liga, la que perdió ante el poderoso Manchester City.

Tras ello pasó por AEK Atenas de Grecia, llevando al equipo, en el que tuvo al argentino Diego Buonanotte a semifinales de la Copa local, pero fue destituido antes de poder disputarlas. 

Tras pasos no tan felices por Real Betis y Shanghái Shenshua de China, llegó a la liga francesa para dirigir a Girondins de Burdeos en la Ligue 1, salvando al equipo del descenso y llevándolo a la Europa League. 

Pero todos estos antecedentes jamás se traspasaron a la cancha en San Carlos de Apoquindo. 

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El equipo sumó puntos importantes en algunos partidos, pero también perdió otros que hacían ver de lejos la lucha por el título, mirando de lejos a Colo Colo.

En juego no lograba convencer y el equipo comenzó a perder el sello con el que había logrado coronarse en los últimos tres torneos con entrenadores diferentes: Beñat San José, Gustavo Quinteros y Ariel Holan.

En Copa Libertadores, eso si, los cruzados lograron avanzar a octavos de final, ronda en el que terminaron eliminados a manos del campeón Palmeiras. La campaña internacional fue la que quizás sostuvo a Poyet más tiempo en la UC. 

La eliminación de Copa Chile a manos de Everton en segunda ronda y una serie de malos resultados en el Campeonato Nacional, terminaron agotano la paciencia con el entrenador que dirigió su último partido en la derrota por 3-0 ante Palestino. 

Tras la destitución de Poyet, Cristián Paulucci, entrenador asistente del primer equipo, asumió de manera interina y el cambio se notó de inmediato. El argentino se estrenó con un 3-1 sobre Audax Italiano y logró siete victorias seguidas al mando del equipo, tropezando sólo con Colo Colo. 

Ese mal resultado ante los albos no golpeó al equipo que siguió en su lucha por alcanzar a los albos, mostrando un buen juego que le permitió superar al “Cacique” en la penúltima fecha con una buena victoria sobre Huachipato de Mario Salas. 

La buena relación de Paulucci con el plantel se notó en cada partido, algo muy distinto a lo que se vio durante la era Poyet, marcando un antes y un después en Universidad Católica.

Esto pese a que su experiencia era escasa. Fue ojeador en la Católica a comienzos de la década pasada, mánager en Huachipato entre 2015 y 2019, mientras que fue ayudante técnico en San Marcos de Arica y la UC. En solitario, sus experiencias eran con San Carlos, Progreso y Belgrano juveniles, todos en Argentina.  

Es así como Universidad Católica alcanzó el prmer tetracampeonato de su historia, de la mano de un entrenador sin demasiada experiencia, pero que estuvo presente en el cuerpo técnico en los últimos tres procesos, tomando un rol estelar tras el fallido paso de Poyet. 

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