Gimnasia y Esgrima de la Plata empató 2-2 en su visita a Newell's Old Boys por la liga argentina, pero la situación que se robó las miradas fue el ingreso de gas pimienta al camarín forastero, con el plantel aún dentro.

Durante el descanso, el equipo de los “lobos” denunció que el lacrimógeno entró por una de las ventanas del vestidor, dando aviso al árbitro Darío Herrera por su demora en el reingreso a la cancha.

Ambos equipos dialogaron en el césped antes de los segundos 45 minutos. Debido a que la situación no generó episodios graves de irritación, Gimnasia afrontó el complemento pese a lo ocurrido. Fue precisamente en la segunda parte donde los platenses recibieron el gol del empate final.

En conferencia de prensa tras el partido, el entrenador Sebastián “Chirola” Romero indicó que “el efecto todavía no se ha ido. Seguimos tosiendo. Una pena, porque (el entretiempo) es el momento para descansar, para estar tranquilos y fueron 15 minutos donde tuvimos poca charla porque uno se tapaba, el otro tosía… tratamos de estar bien“.

Por otro lado, el delantero Cristian Tarragona llamó a la tranquilidad. “Creo que afuera hubo problemas y entró un poco de gas pimienta por la rejilla. Pero estamos todos bien, nada grave“, dijo a ESPN.

El episodio trajo a la memoria el escándalo mundial en la Copa Libertadores 2015, cuando el superclásico de Boca Juniors contra River Plate fue suspendido por un alevoso ataque “Xeneize” al plantel “Millonario”.

Afortunadamente, lo ocurrido en el Estadio “Marcelo Bielsa” de Rosario no pasó a mayores, fuera de afectaciones leves a los jugadores y staff de Gimnasia. Guillermo Ortiz (36′) y Lisandro Montenegro (57′) anotaron para el local, mientras Benjamín Domínguez y Tarragona hicieron lo propio en la visita.