La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) anunció este miércoles que la Supercopa, que enfrentará a Flamengo (de los chilenos Arturo Vidal y Erick Pulgar) y a Palmeiras (de Benjamín Kuscevic), se disputará en Brasilia el próximo domingo 29 de enero, a pesar de los graves disturbios ocurridos el pasado domingo.

El partido de la Supercopa se jugará en el Estadio “Mané Garrincha” y enfrentará a Palmeiras, campeón de liga, y a Flamengo, campeón de la Copa de Brasil, que además es el ganador de la última edición de la Copa Libertadores.

La decisión se tomó después de que la CBF consultara al Gobierno brasileño sobre las condiciones de seguridad en la capital del país, que fue escenario de un ataque perpetrado por miles de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro contra la sede de los tres poderes.