El seleccionador de México, Juan Carlos Osorio, asumió la humillación sufrida por su equipo en cuartos de final de la Copa América frente a Chile (0-7), y reconoció que la actuación de los suyos "fue una vergüenza", por lo que pidió "sinceras disculpas a la afición".

"Mis más sinceras disculpas a la afición mexicana, fue una vergüenza", dijo el técnico al comienzo de su comparecencia en la conferencia de prensa posterior al choque.

"Erré en la selección del grupo y en la parte estratégica y táctica del partido. Asumo toda la responsabilidad de esta derrota", agregó.

El entrenador no puso cortapisas a la exhibición de su contrincante.

"Me equivoqué en todo. Quisimos salir a disputar la posesión, y aunque usamos tres volantes, nunca pudimos controlar el partido. Defensivamente fuimos muy frágiles y Chile disfrutó de un gran rendimiento colectivo. Por nuestro lado, nadie estuvo a su nivel", manifestó.

No obstante, recalcó que la diferencia vista hoy entre ambas selecciones no es la real.

"Hay que respetar las opiniones de la gente y aceptar la derrota. No me imaginaba un resultado así, pero es responsabilidad mía. No hay siete goles de diferencia entre el fútbol chileno y el mexicano", apuntó.

Osorio lamentó que ni siquiera tuvo ocasión de reaccionar tras los cambios en el descanso.

"No tuvimos ni la oportunidad de replantear el partido porque el tercer gol mató nuestras posibilidades", indicó. "Es indiscutible que son los quintos del mundo por razones valederas, pero nosotros hicimos un partido horrible", manifestó.

México afrontó un duro revés tras una racha de 22 partidos sin perder. "Ahora estoy tratando de digerir lo que ha pasado y ya pensaré qué hay que hacer", observó el seleccionador, quien ve a Chile como gran candidato para ganar el torneo.