La clasificación de Colo Colo a la Copa Sudamericana también se transformó en una complicación, puesto que el conjunto albo deberá armar su agenda para visitar a Real Potosí el próximo 2 de agosto y hacerlo a 3.900 metros de altura en el Estadio "Mario Mercado".

 

La idea del conjunto popular es realizar pruebas médicas para buscar a los integrantes del plantel que estén más aptos para afrontar el duelo en la altiplánica ciudad, tal como lo explicó el kinesiólogo Pedro Oñate.

 

"Lo más probables es que se realicen trabajos con algunas mediciones y así llevar a los que puedan tolerar mucho mejor la altura. Generalmente los mediocampistas son los que tienen capacidad de rendimiento, capacidad de oxígeno y deberían andar mucho mejor allá arriba", dijo el profesional.

 

La noticia puso feliz a David Henríquez, quien confesó las molestias que siente cada vez que juega en la altura.

 

"Me parece bien, porque me cuesta mucho jugar en la altura. La última vez que fue en La Paz y dije 'nunca más vuelvo', porque entré y quería puro salir a la cancha. Que vayan los más capacitados y la idea es no relajarnos en el campeonato nacional, porque es algo inédito ir por el cuarto título", explicó el capitán albo.

 

Claudio Borghi supervisará personalmente los estudios y aseguró que es lo más recomendable.

 

"Yo no he jugado a esa altura y la verdad es que cuando jugué me sangraba la nariz, y eso que no tenía gran despliegue, me movía menos que un gato de yeso, pero daban ganas de vomitar, cae mal la comida, dolía la cabeza", aseguró. (Cooperativa.cl)