La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) está peparando un plan B para la sede de la final de la Copa Libertadores 2019 entre River Plate y Flamengo, programada para el 23 de noviembre en el Estadio Nacional de Santiago, debido a la crisis social y numerosas protestas vividas durante los últimos días en nuestro país.

Según informó Olé y recogió este jueves El Mercurio, en la Conmebol están atentos a la evolución del conflicto y pese a que durante los últimos días ratificaron a Chile como anfitrión del partido, en la dirigencia del organismo manejan la posibilidad de trasladar el duelo al Estadio La Olla de Asunción, Paraguay, mismo escenario de la final de la Copa Sudamericana, el cual está en condiciones de recibir el evento.

Más allá de eso, desde la Confederación insisten que "el partido sigue fijado en Santiago, es lo que hasta ahora puedo decir", según sostuvo el directivo colombiano Ramón Jesurún.

En tanto, Antonio Caselli, dirigente de River, señaló que "nos preocupa la situación social de Chile, porque estamos cerca de un evento importantísimo como la final de la Copa Libertadores. La Conmebol viene planificando este partido hace más de un año y esperamos que que todo se solucione y poder jugar la primera final única en Santiago, una ciudad extraordinaria".

Esto fue complementado durante este miércoles por el presidente del club, Rodolofo D'Onofrio, en Fox Sports, asegurando que "todo hace ver que vamos a ir a Santiago de Chile".

La final está programada para el 23 de noviembre y habrá que esperar la decisión definitiva de la Conmebol.