El francés Leon Marchand y la australiana Ariarne Titmus dejaron su nombre inscrito en la historia tras batir récords mundiales de natación enla cita planetaria que se lleva a cabo en Fukuoka, Japón.

Marchand pulverizó en 1.34 segundos un récord que databa de 2008, pero sobre todo porque el poseedor del mismo era un mito de la natación: Michael Phelps, quien, además, le entregó la medalla de oro.

Marchand nadó 15 años después en 4:02.50, Phelps lo había hecho en 4:03.84 en 400 metros estilos.

Titmus lo logró en los 400 libre en la final, al nadar en 3:55.38 y rebajar la marca que estaba en poder de Summer MacIntosh (3:56.08), que fue cuarta.